El coleccionista John K. Lattimer acaba de fallecer en Englewood, Nueva Jersey. Era urólogo y poseía objetos como cuadros pintados por Hitler, ampolla de cianuro de Hermann Goring o el cuello de la camisa ensangrentada con la que murió Lincoln. Pero sin duda, la estrella de su colección era el pene de Napoleón.
Se supone que el pene había sido amputado por el sacerdote que administró la extrema unción a Napoleón. En aquellos días los restos físicos ejercían una fuerte atracción sobre el público.
Tras su muerte en la isla de Santa Elena, “los árboles que bordeaban su tumba fueron literalmente hechos astillas para hacer con ellas souvenirs”, según cuenta el New York Times.
La autenticidad del pene de Napoleón ha sido puesta en duda en muchas ocasiones, al igual que algunas otras pertenencias del estadista, como trozos de intestino o dientes.
Aunque el doctor Lattimer, que era urólogo, podría haber aducido un interés profesional en los órganos genitales de Napoleón, no ocurre lo mismo con su anterior dueño, el librero A. S. W. Rosenbach de Philadelphia, y tantos otros propietarios, que contribuyeron a las idas y venidas del miembro desde Europa hasta América durante dos siglos.
El pene de Napoleon. no comentarios
Posted at 20:29 in PERSONAJES
Publicado por
Marco on 27.8.07
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